En el corazón de la región montañosa de La Libertad, en Negros Oriental, los estudiantes que querían cursar estudios secundarios se enfrentaban a enormes desafíos. Para asistir a la escuela, los estudiantes tenían que viajar dos horas montaña abajo, un trayecto que a menudo se veía interrumpido por la temporada de lluvias. Las dificultades económicas, agravadas por los escasos ingresos agrícolas y el terreno difícil, hacían que la educación secundaria pareciera inalcanzable. 

En la Escuela de la Misión de San Francisco, bajo la guía compasiva del Padre Royce Trinidad, OFM, a estos estudiantes merecedores se les ofrece no solo una educación, sino una oportunidad de transformar sus vidas.

La escuela ofrece una beca integral que cubre la matrícula, las comidas, el alojamiento y una pequeña asignación, y pide a cambio que los estudiantes contribuyan a la comunidad a través de tareas como la limpieza y la jardinería. La escuela pone énfasis en el desarrollo personal y humano, ayudando a los estudiantes a aprovechar sus talentos y, lo más importante, garantizando que las barreras financieras no eclipsen su potencial.  

El año pasado, el padre Royce solicitó fondos para apoyar a ocho estudiantes, pero cuando recibió cinco solicitudes adicionales, supo que tenía que encontrar soluciones creativas para aceptar a los doce. Y ahora, un año después, estos doce estudiantes están expresando su profunda gratitud.

Uno comparte: “Recibir esta beca significa más para mí de lo que las palabras pueden expresar. Su generosidad me ha inspirado a trabajar más duro, soñar en grande y esforzarme por alcanzar la excelencia en todo lo que hago. Gracias desde el fondo de mi corazón.

Otro agrega: “El apoyo que brindan a estudiantes como yo es invaluable y me siento honrado de estar entre los beneficiarios. Me comprometí a aprovechar al máximo esta oportunidad y alcanzar mis metas académicas”.

Otros expresan sentimientos similares y comparten: “Su amabilidad y apoyo han marcado una diferencia significativa en mi vida y estaré eternamente agradecido”.Gracias por creer en mí y brindarme los recursos para continuar mi educación.

El padre Royce dice: “Estamos deseando continuar con el proyecto durante el próximo año escolar, ya que muchos más estudiantes también están interesados en convertirse en beneficiarios de becas”.