En Chile, el convento franciscano de Recoleta es un faro de esperanza y apoyo para las personas sin hogar, los migrantes y las poblaciones ancianas vulnerables. El lugar funciona como un centro de oración, meditación y diversos servicios sociales, entre ellos, el Comedor Solidario Fray Andresito.
Bajo la dirección de Fray Andresito y el P. Vicente Crespo, el Comedor Solidario Proporciona comidas diarias a aproximadamente 150 a 170 personas, atendiendo a más de 35.000 cada año.Las personas atendidas a menudo luchan contra el alcohol y las drogas, el VIH y enfermedades psicológicas.
El Comedor Solidario Fray Andresito forma parte de una misión más amplia de ofrecer apoyo tanto material como espiritual. Desde el año 2000, el comedor ha experimentado mejoras significativas, con la construcción de nuevas instalaciones y la instalación de un nuevo sistema de canaletas y evacuación de aguas pluviales para mejorar la integridad estructural del edificio.
A pesar de los desafíos estructurales, políticos y de otro tipo, el comedor continúa atendiendo a 800 personas cada semana.